Detrás de todo el ruido.
Es ese momento cuando llegas a tu refugio y tu corazón siente, cuando está más sensible que nunca.
Es ese momento cuando caes en cuenta que jamás estuviste ante tanta sobriedad con vos mismo. Cuando sos honesto y podes ver donde estabas “parado” antes. De donde venis. De donde posiblemente habías muerto.
Estar detrás de todo el ruido, es saber que por fin llegaste. Que por fin tenes otros ojos. Que estás despertando.
¡Posiblemente es saber que el ruido, aquello, nunca fue lo que parecía ser! O simplemente, terminó lo único que tenía para darte.
Estar detrás de todo el ruido, es terminar con lo que te llevaba de acá para allá, sin ir a ningún lado.
Es cuando creíste que no dabas para más. Pero ahí estás, al otro lado y tal vez ya conquistándolo. Es cuando reflexionas, cuando reconoces y, sobre todo, cuando aceptas.
Estar detrás de todo el ruido, es lo que te marca y lo que te impulsa. Lo que primero te inmoviliza y lo que después te hace surgir. Es ese instante en el que observas de forma panorámica. Te ubicas, te despojas, razonas, soltas, afirmas, cerras… y muchos verbos más, MUCHAS acciones más.
Te conectas con vos mismo, te hablas, te escuchas, te consolas… Fluis. Cambias.
Es ese momento de calma. Despertas y te levantas poco a poco, cuidadosamente.
Estar detrás de todo el ruido, es saber que eso que te estaba destruyendo quizás, sin que te dieras cuenta, ya se fue. Es cuando has aprendido la lección de algún proceso que estabas pasando. Es lo que llaman “El arcoíris después de la tormenta”.
Ese lugar, es un tiempo de luz, un silencio final de todo aquello que estaba exigiendo algo de vos, que tal vez, no estabas dispuesto o disponible a dar.
Estar detrás de todo el ruido, es decirle adiós a alguna parte de vos. Y también es decirle “mucho gusto” a un nuevo proceso.
Estar ahí, es de las mejores experiencias de tranquilidad que existen.
Posiblemente el ruido no desaparezca totalmente, tal vez se vaya y regrese.
Pero vos ya no regresas a él.
Posiblemente el ruido no desaparezca, tal vez siga sonando, fuerte o suave.
Pero vos ya decidiste no escucharlo. Vos ya decidiste salir y estar detrás de todo el ruido. En calma.
Estar detrás de todo el ruido, es saber que sos capaz y que sí…
Ganaste.
Pd: [Este escrito lo terminé escuchando "A song with no name" de Norah Jones, "Softly" de Rhye, "Wash" de Bon Iver, "Break Apart" de Rhye y "State Lines" de Novo Amor.. te dejo el URL sobre cada una para que te inspires leyendo].
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